La alimentación es un derecho fundamental de todos los seres humanos, algo que para muchos, pasa desapercibido porque no les ha faltado nunca y para otros es una preocupación constante ya que su falta de recursos económicos les pone cuesta arriba llenar la cesta de la compra. Por suerte, la solidaridad y la colaboración entre las distintas entidades e instituciones para proteger a las personas en situación de vulnerabilidad se lo hacen más liviano.
Así ha sido para cerca de mil vecinos de Huércal de Almería que han recibido un súper aguinaldo de Navidad en forma de carrito de la compra colmado de alimentos. Gracias a las ayudas del Fondo de Ayuda Europea para los Más Necesitados (FEAD) “cedida por el Banco de Alimentos, Cruz Roja y el Ayuntamiento que también ha comprado alimentos”, explica Yolanda Fernández, voluntaria en el Centro Social José Guirado (antigua Residencia de la Tercera Edad), donde se recepcionan y almacenan los paquetes de comida con todas las medidas de almacenaje, para repartir desde allí estas ayudas de emergencia social a una larga lista de familias más desfavorecidas del municipio.
Decenas de personas hacían cola a las puertas de la antigua residencia para recibir estos alimentos. Una iniciativa que se repite cada año, aunque en ediciones anteriores por estas fechas se llevaba a cabo el reparto de dulces navideños, en esta ocasión, pensando en los más necesitados, “como cada Navidad se ha hecho un reparto extra para los vecinos más vulnerables del pueblo, pero hemos elegido un gran carro de comida no perecedera, suprimiendo la típica cesta de mantecados”, subraya Fernández.
La distribución de los alimentos ha corrido a cargo del equipo de voluntarios y trabajadores municipales encargados de hacerlos llegar a las familias más vulnerables del municipio: Ana Cazorla, trabajadora socio sanitaria, Francisco Capel, funcionario municipal, Antonio Jiménez, catequista, y Yolanda Fernández, quien asegura que “somos un equipo, una familia de voluntarios que colaboramos, gestionamos y conseguimos llevar a cabo tan grandísima labor”.
Una labor que llevan a cabo hasta tres veces al mes para ayudar a las familias con mayor necesidad del municipio, 250 según los datos de Cruz Roja, “los repartos normalmente si es de productos frescos, frutas y verduras, los hacemos tres veces al mes, a lo que se suman las cajas de emergencia social y grandes repartos cada dos o tres meses. Siempre estamos entregando ayuda a quienes más lo necesitan”, matiza.
Este súper reparto de alimentos, compuesto productos congelados desde carne, pescado, verduras, croquetas, pizzas, entre otros, así como productos no perecederos desde legumbres, aceite, pastas y se han incluido alimentos para los más pequeños: tanto leche de continuación, como potitos salados y frutas y papillas de cereales, ha sido para 150 familias en situación de vulnerabilidad del municipio, compuestas desde dos a siete miembros por lo que cerca de 1.000 huercalenses se han beneficiado de este súper reparto de productos no perecederos. Para facilitarles el traslado se les hacía entrega de estos alimentos en un carro de la compra.
En el actual contexto de crisis sociosanitaria en muchos estratos sociales la situación de las personas vulnerables dificultando su acceso a bienes de primera necesidad como la alimentación ha aumentado, en Huércal de Almería “no ha aumentado ni tampoco disminuido, seguimos con casi 250 familias sobre listado de Cruz Roja”, concluye Fernández.
Para hacer posible este reparto, se ha contado con la ayuda de la empresa Guillen Cial, que facilitan los congeladores y el supermercado Cash Borosa.
